¡Hola Mamá!

viernes, 20 de agosto de 2010

La sinceridad da asco.

Y no es por el hecho de que me haya dado cuenta, me hayan dicho, haya dicho o similar. La sinceridad da asco. ¿Porqué?

Yo te lo diré, llevo casi dos semanas pensando en lo mismo, actuando conforme a una serie de impulsos y sensaciones o de sentido común (aún no lo tengo muy claro), pensando en lo mismo. Sí, sé que me repetido.
Llevo dos semanas dependiendo de mí misma, no en ese sentido en el que estas pensando. En el sentido de que he sido sincera, he roto todas las barreras de mi mente, corazón y ser, y he sido completamente sincera o al menos de una manera impresionista. Y nada, ni un sólo susurro.

He pensado en ti Mamá. He pensado en muchas cosas y empiezo a flaquear. (odio esa palabra, flaquear...bugh)

Mum help me, i need somebody.

P.D. Te quiero, aunque no haya postales.